Muchas horas de bicicleta, duros entrenamientos de carrera, gran cantidad de metros en el agua, alimentación a rajatabla, sacrificar algunos placeres de la vida diaria, y el día de la competición…pluf! Petamos.

¿Que ha pasado? La ansiedad se apoderó de nosotros.

A muchos deportistas de nivel amateur, como atletas, futbolistas, triatletas y ciclistas entre otros, al no estar habituados a la competición puede superarles mentalmente la situación y crean un estado de ansiedad en el cual no rindan adecuadamente.

¿Como podemos evitar que esa temible ansiedad se apodere de nosotros?

1- Fíjate metas realistas. No todo el mundo está preparado para realizar un Ironman, un Half o una Maratón. Vamos peldaño a peldaño según nuestras posibilidades. Un triatlón supersprint, una carrera popular de 5.000m o una travesía en el mar de distancias reducidas son el sitio ideal para debutar.

2- Compite. Si en los entrenamientos ves que tu ritmo es bueno, tienes fuerza y te sientes bien pero en las competiciones las sensaciones son totalmente las contrarias, la solución es competir. El miedo escénico se entrena, cuanto más compitas más fácilmente te aclimatarás a ese estado de tensión competitivo.

3- Lleva un ritmo que puedas seguir. Toma referencias reales y no te guíes por sensaciones. Lo ideal es realizar el segundo tramo de la competición más rápido que el primero.

4- Si es una de tus primeras competiciones, trata de acabar con ganas de más. Conseguirás «picarte» contigo mismo para continuar entrenando y no terminarás tan exhausto como para aborrecer el deporte.

5- En un triatlón o en una travesía de natación colócate a un lado o por detrás. Si te dispones en los primeros sitios seguramente te agobies de verte rodeado de tanta gente, de los codazos y del ritmo.

6- Que te acompañe gente de tu alrededor. Si vas justo de energías, esos gritos de ánimo serán una inyección de moral muy favorable.

7- Prepara el material con tiempo. Las prisas no son buenas consejeras y menos el día de una competición. Si te falta algo de material o no lo has revisado correctamente lo más fácil es que algo falle y los nervios se apoderen de ti.

8- Visualiza las transiciones. Esto también se entrena, tanto física como mentalmente. Vídeos en internet, competiciones en vivo…

9- Comparte vivencias con los otros deportistas. Antes de empezar, en foros, con amigos…siempre es un buen momento para compartir y disfrutar las sensaciones del deporte, además siempre podrás recibir algún consejo positivo y ponerlo en práctica.

10- La presión no existe. Te la pones tu mismo, estás aquí para disfrutar, te has esforzado, has entrenado duro  y esta es tu hora, céntrate en disfrutar.

Y ahora, ¡A por todas!

Rubén Gadea Mira

Preparador Físico en Sanus Vitae